Estimados hermanos, les saludo en el nombre
precioso de nuestro Salvador Jesucristo, deseando que Dios bendiga su Iglesia y
sus familias.
Damos gracias a Dios por la ofrenda de amor
que recibimos de parte de Uds. Amados hermanos, es de mucha bendición contar
con el apoyo de las demás iglesias; la ofrenda que hemos recibido la
canalizamos en bolsas de cemento que necesitamos para poder plantar las canastillas
y la cimentación donde se requiere bastante material en especial el cemento;
esta construcción tiene como finalidad tener ambientes de material noble que
sirvan para clases de Escuela Dominical y los servicios higiénicos de la
Iglesia; queremos tener mejores ambientes para acoger a las personas que vienen
a la casa de Dios.
Mi persona como pastor de la Iglesia y
todos mis hermanos damos gracias a Dios por su amor dándonos esta ofrenda,
deseamos que Dios les bendiga de la misma forma que nosotros fuimos bendecidos
por medio de ustedes.
Bendiciones y que Dios siga obrando en su
Iglesia.